El Barrio del Castillo es el más antiguo de los cuatro barrios históricos de la ciudad de Cagliari. Situado en una colina, a unos cien metros sobre el nivel del mar. Los pisanos fundaron este barrio en el siglo XIII, fortificado con murallas, torres y baluartes, y establecieron allí la sede civil, militar y religiosa. Hoy en día es el mejor lugar para admirar la ciudad, su puerto y su costa. Por la noche es el lugar donde disfrutar de la vibrante movida de Cagliari.